Preparación y funciones de un administrador de propiedad horizontal
Dentro de estas funciones se encuentra una en especial, que más allá de representar a la urbanización en la mayoría de los aspectos legales, también se perfila como una opción laboral que se encuentra en auge.
Para todo aquel que viva en un conjunto residencial, dentro de todos los habitantes siempre existe la responsabilidad de reunirse mensualmente, o en el momento que sea necesario, para discutir las labores administrativas y de mantenimiento del lugar, que se rige por las normas de una propiedad horizontal.
Dentro de estas funciones se encuentra una en especial, que más allá de representar a la urbanización en la mayoría de los aspectos legales, también se perfila como una opción laboral que se encuentra en auge: el administrador de propiedad horizontal.
Esta persona, elegida por los otros propietarios del lugar y por la constructora o inmobiliaria que se encargue de hacer realidad el proyecto urbanístico, tiene unas funciones muy específicas. Dentro del reglamento de Propiedad Horizontal, sus labores se centran en la conservación del edificio o edificios, elegir el personal de servicio, contratar los seguros y manejar los bienes comunes del conjunto.
Además está en la obligación de recaudar y administrar las cuotas de expensas comunes que los propietarios deben aportar para la manutención de la urbanización; también está obligado a reunir y presidir las asambleas y hacer cumplir el reglamento y cobrar las deudas de morosos.
Este oficio se ha convertido en una excelente opción laboral para muchas personas que desean un ambiente de trabajo distinto o que buscan un empleo estable cerca de su casa, o en su casa misma. Sin embargo, no es tan fácil como sentarse en una silla y declararse administrador de una propiedad horizontal en Bogotá.
Se requiere haber estudiado una carrera afín, como administración de empresas, contador, economista o abogado. Diplomados en funciones similares presenciales o a través de la red, ofrecidos por distintas instituciones también permiten a las personas capacitarse en este oficio y asumir la administración de un inmueble comercial o residencial.
Cada vez son más las personas que, luego de estudiar y encontrarse en desempleo, o que se capacitan para asumir este rol, a la par que crece el número de viviendas residenciales en Bogotá, respondiendo a las necesidades de las familias capitalinas y a la reducción de precios y subsidios que se brindan a los apartamentos nuevos en Bogotá.
Si desea asumir el reto de administrar un conjunto residencial, OIKOS Inmobiliaria le recomienda, además de capacitarse en la dirección transparente de un inmueble o negocio, prepararse financieramente para hacer frente a los presupuestos que tendrá que manejar, en conocer las normas urbanísticas y leyes de finca raíz, de acercarse a las personas que vivan en el lugar y contar con el apoyo de un abogado que represente jurídicamente al lugar.